Explicar los beneficios de conectar un sistema audiovisual a una red.

Del mismo modo en que un sistema audiovisual puede conectar a muchos subsistemas más pequeños, muchos sistemas audiovisuales pueden conectarse en una red. Conectar sistemas audiovisuales a una red puede convertirlos en herramientas de comunicación aún más poderosas. En esta lección aprenderá qué es una red y cómo los sistemas audiovisuales pueden beneficiarse con el acceso a la red.

Una red es un grupo de dispositivos conectados de manera tal que ello les permite comunicarse entre sí. Las redes se categorizan según su alcance o el área que cubren.

Las redes permiten la comunicación entre dispositivos audiovisuales dispersos en un edificio, en un campus o por todo el mundo. La conectividad de red ha generado muchas posibilidades para los sistemas audiovisuales, que todavía están en etapas de exploración y expansión. Los sistemas audiovisuales ya se conectan a las redes por diversas razones.

A continuación se presentan algunos ejemplos de tipos de redes:

• Una red de área local (LAN) conecta dispositivos dentro de un área geográfica pequeña, como un edificio o un campus. En general las LAN pertenecen al usuario final o son operadas por él.
• Una red de área amplia (WAN) cubre un área geográfica grande, como un estado o un país. La Internet, que cubre a todo el mundo, es una WAN grande.
• Una red de área local virtual (VLAN) conecta LAN independientes y forma un grupo lógico. Por ejemplo, es posible combinar las LAN de cada una de las sucursales de una compañía grande para formar una VLAN de toda la compañía.

Se puede almacenar y entregar contenido audiovisual mediante la red. La computadora o el dispositivo que utiliza para tomar esta clase tienen probablemente archivos de audio o video digital almacenados en su disco rígido. Los archivos que se utilizan en las presentaciones audiovisuales, incluyendo videos, archivos de audio, imágenes y presentaciones de diapositivas, pueden almacenarse y compartirse fácilmente en una red.

Los dispositivos audiovisuales pueden monitorearse y controlarse en forma remota a través de la red. Cuando falla un sistema audiovisual no siempre resulta práctico enviar un técnico a las instalaciones para que resuelva el problema. Las instalaciones pueden estar alejadas o el problema podría requerir una solución inmediata. Sin embargo, si el sistema audiovisual está enlazado a una red, el técnico podría resolver instantáneamente el problema desde su computadora o dispositivo móvil.

Al utilizar el monitoreo remoto, los profesionales audiovisuales también pueden prevenir problemas en lugar de limitarse simplemente a reaccionar cuando ocurren. Un proyector conectado en red puede enviarle un mensaje de correo electrónico o de texto a un técnico cuando la lámpara está por llegar al fin de su vida útil. Una pantalla de presentación costosa puede enviar una notificación a seguridad si alguien la desconecta. Un servidor de contenidos puede enviar una alerta por correo electrónico cuando se está acabando el espacio en el disco rígido.

Los sistemas audiovisuales pueden compartir recursos a través de la red. Es posible que distintos sistemas audiovisuales utilicen los mismos programas de software. Ese software puede almacenarse en el servidor y se puede acceder a él en cada espacio audiovisual, cuando sea necesario. Las aplicaciones audiovisuales que requieren mayor potencia de cálculo durante períodos cortos pueden conectarse a la red, lo que les brinda acceso a mayor cantidad de memoria o velocidad de procesamiento.