Un factor importante en lo que respecta a la capacidad de una persona de leer cómodamente el texto que aparece en una imagen proyectada es la altura de los caracteres. Si el espectador más alejado no puede leer el texto con facilidad, es posible que le resulte difícil al presentador comunicar la información. El multiplicador 150 ofrece una pauta para determinar la distancia máxima a la que puede sentarse el espectador y seguir leyendo el texto de una altura conocida.
Hay una relación directa entre la altura del texto y la distancia del espectador. A medida que la altura del texto aumenta, también aumenta la distancia. A medida que la altura del texto disminuye también disminuye la distancia.